domingo, 25 de febrero de 2007


DAME TU MANO

Dame tu mano ahora mi querido hermano
dame tu franca mano en forma palmaria
déjame que yo perciba tu casta solidaria
déjame creer que en la vida soy humano.

Extiende tu mano siempre en forma generosa
mirando sincero a quien tu amistad ofrendas
es honroso que tú la fraternidad emprendas
es decoroso que tu energía resulte contagiosa.

Cada que estrechas sincero tu diestra mano
al jovial amigo tu cálida dulzura le prodigas
con tu diáfana bondad la tristeza le mitigas
y así tu corazón del amor se siente cercano.

No importa si al hacerlo pareces provinciano
pero saluda siempre brindando tu gentileza
ya verás que tu alma coge brillo de nobleza
en tanto se complace sonriente el Soberano.


Mauricio Bernal Restrepo.
(Versos diversos)®
Bogotá, Colombia.
Fotografía: Autor desconocido.









CANTA GUITARRA

Viejo triste que derrochas sufrimiento
emotivas notas hoy defines con tus manos
poco vale que te escuchen tus hermanos
sólo cantas para honrar el sentimiento
ahora puedes sentirte muy contento
y dejar que vuele suave tu tonada
en cada nota tu melancólica mirada
apaga los ojos en busca de sustento.

Noble la guitarra se aloja entre tus brazos
para brindar su cuerpo al rol de tu caricia
tu emotivo canto la nostalgia te propicia
en tanto tu corazón vuela en mil pedazos
ya no queda de tu vida ni los trazos
de pacientes horas dedicado a tu sudor
sólo ahora que manso interpretas el amor
puedes ver el sol exhibiendo sus ocasos.

Toca viejo la guitarra con suave entonación
y deja justo que vengan inefables privilegios
ahora aprendes en el mejor de los colegios
acariciando emocionado tu generoso diapasón
vuela taciturno invocando tu regia inspiración
en tanto te acometen inusitados sortilegios
deja que vuelen raudo tus cálidos arpegios
y que estalle de júbilo tu enaltecido corazón.


Mauricio Bernal Restrepo.
Versos diversos®
Bogotá, Colombia.
Ilustración: Pablo Picasso.




INCERTIDUMBRE

Cuántos hombres claman
y cuántas mujeres imploran
impotentes su sangre derraman
inconsolables en la agonía lloran
muy frecuente su suerte deploran
y otros arrogantes su orgullo proclaman
torpemente de su hermano difaman
rara vez su indulto condonan
acaso efímeramente se perdonan
pero muy pronto su venganza reclaman
cuán poco la concordia proporcionan
y qué frenéticos la codicia disparan
ya parece que no pensaran
como personas que razonan
mientras unos fervientes oran
otros arrogantes se ufanan
es triste ver como rumoran
insensato lo mucho que exclaman
ya poco la tranquilidad añoran
obsesivos su odio señalan
ciertamente que a Dios ignoran
mientras a la vida
a la hermosa vida
pecaminosamente profanan.


Mauricio Bernal Restrepo.
Bogotá, Colombia.