sábado, 16 de agosto de 2008


FANNY GRANDIOSA

Después de lidiar durante quince días con un penoso quebranto de salud en su sistema renal, tristemente se despidió de este mundo terreno esa mujer que con su tesonera labor e inagotable amor por el arte histriónico, dejó una huella indeleble en el corazón de los colombianos y de tantos extranjeros que desde lugares muy remotos acudieron a su encuentro para hacer del teatro un verdadero ritual de la cultura. Fanny Mickey ha descansado en la paz del Señor y ahora se dirige a los entornos celestiales en los que muchos ángeles inmaculados le abren el telón de la excelencia. Colombia entera se recoge indulgente para rendirle el más sentido tributo póstumo de gratitud, a esta reina del éxtasis actoral, quien construyera con su excelsa dramaturgia y su talento emprendedor, toda una fervorosa devoción por el arte de la expresión corporal, de la heterogénea gesticulación y la retórica magistral. Fanny Mickey deja un vacío muy profundo en el alma de los colombianos, pero también nos deja abierto el libro de su fantástica vida, para que lo conservemos en nuestro recuerdo como una verdadera joya del sentimiento y la emoción. Ciertamente Colombia se siente muy gratificada por haber albergado como a la mejor de sus hijas adoptivas, a esta noble y virtuosa mujer argentina, quien ahora continúa con su función en los tablados del infinito.

Paz en su tumba para esta gentil dama tan excepcional.

Mauricio Bernal Restrepo.
Bogotá, Colombia.

DALE SEÑOR EL DESCANSO ETERNO...
Y QUE BRILLE PARA ELLA LA LUZ PERPETUA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario